TRATAMIENTO QUIRÚRGICO DE LA FÍSTULA ANAL
Mediante este procedimiento se pretende eliminar el trayecto por el que se contaminan los tejidos perianales en los que se producen los abscesos.
El procedimiento requiere la administración de anestesia y es posible que, durante o después de la intervención, sea necesaria la utilización de sangre y/o hemoderivados, de cuyos riesgos le informará el servicio de anestesia.
Mediante esta técnica se canalizará el trayecto de la fístula y se tratará mediante su sección y puesta a plano, extirpación del mismo o colocación de un hilo a través del trayecto. Puede ser necesario realizar la reparación de los esfínteres o colocación de injertos, y, en fístulas complejas comunicadas con otros órganos, se repararán ambos orificios y, excepcionalmente, es necesario el empleo de un ano artificial.
Cabe la posibilidad de que durante la cirugía haya que realizar modificaciones del procedimiento por los hallazgos intraoperatorios para proporcionarle el tratamiento más adecuado.
A pesar de la adecuada elección de la técnica y de su correcta realización pueden presentarse efectos indeseables, tanto los comunes derivados de toda intervención y que pueden afectar a todos los órganos y sistemas, como otros específicos del procedimiento:
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Poco graves y frecuentes: infección o sangrado de la herida; flebitis; retención aguda de orina; inflamación del ano; dolor prolongado en la zona de la operación.
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Graves y poco frecuentes: infección importante del ano y periné; incontinencia a gases e incluso a heces; estenosis de ano; reproducción de la fístula.
Estas complicaciones, habitualmente, se resuelven con tratamiento médico (medicamentos, sueros, etc.), pero pueden llegar a requerir una reintervención, generalmente de urgencia, incluyendo un riesgo mínimo de mortalidad
Para la realización de esta técnica puede ser necesaria una preparación previa que, en ocasiones, produce efectos colaterales no deseados.
Debe comunicar al médico sus posibles alergias medicamentosas, alteraciones de la coagulación, enfermedades cardiovasculares, existencia de prótesis, marcapasos, medicaciones actuales o cualquier otra circunstancia.